martes, 18 de septiembre de 2018

Mi construcción ósea

Para saludar este nuevo día o despedir al que se fue. No lo sé

La construcción de mi estirpe
también pasa por mis tripas
Mis huesos con su húmero
humedecen sus paredes
Los números de achaques
aumentan con el tiempo

En las calles con baches
de mi dermis
los autos de mis células
vienen
se desplazan
aceleran
descomponen la suspensión
no suspenden la descomposición

Edificios
vecindades
parquesitos
y colonias
que necesitan remodelación
dentro de mi cuerpo ya truenan
traquetean sus cartílagos
sus conexiones subterráneas suenan
como los rayos las articulaciones
en cada filoso límite
el cuerpo calle campo-ciudad
 se envejece
se hace antiguo

Las aceras altas por donde pasea la vista
necesitan pintura
algunas calles sin pavimento
se encharcan de lodosos sentimientos
con las lluvias se limpia
depura y purifica el alma que nos contiene

De noche de día
no deja de trabajar
se le oyen los ruidos
hasta lo más profundo
en cualquier momento
ladrido de perro el berrinche

No deja de producir
está sujeto al ciclo que jamás retrocede
cada año da fruto nuevo
Cada rato el aire es nuevo
Cada día la luz es nueva
Cada instante genera para mí su habitante

Para decorarla cada fecha festiva
para recordarla esta noche que casi duermo
día a día festejarla con prendas distintas
limpias, perfumadas, honrosas
con ornamentos las avenidas de mis brazos
Las carreteras de mis tripas
El lago profundo de mi pecho 
El mar de mi vientre
de mis piernas calles principales
Las rocosas coyunturas de mis tobillos
la tierra de mis pies descalzos.
Hay que recuperar su energía renovable.

-Primeras horas del 19 de septiembre 2018-

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