jueves, 23 de abril de 2020

Rutina ocho.

Estiro. 
Uno
Dos.
Flexiono
Uno
Dos 
Giro de tobillos  
Uno 
Dos
El reloj comienza 
Primer síntoma 
Dolor en pies 
No precisamente
Tal vez pantorrillas 
Tendones interiores
 de los huesos
Un dolor juguetón
Que te recuerda 
En un kilómetro pasa
El ritmo me aguanta las piernas
En el segundo kilómetro 
Contemplo el paisaje 
Veo el ejido
Me visualizo andando a mi trote 
Por su perímetro
acaricio su contorno
Le cosquilleo las costillas 
Esquivo sus piedras
Al tercer kilómetro
el peso me cimbra 
De nuevo el dolor 
Me dice que ya disfruté del paisaje 
Me detengo a caminar 
A estas alturas 
Me encuentro bañado en sudor 
Inmerso en mis pensamientos 
Doy vuelta
A la preocupación
En mi mente marcar un nuevo camino
No hay tiempo que perder 
Arranco de nuevo 
A trote de caballo 
En esta estepa
Y en esta etapa 
Me encuentro caballos
Mis piernas 
a medio kilómetro
Se vuelven motores
Mi cuerpo 
Envuelto en chamarra
Evapora calor 
Mis ojos se inundan 
El sudor cae a tierra 
Mi paso firme 
Sin titubeo
Enardecido le sigue 
El trance entra en mi mente
Me muevo con el viento
Medito en inalar profundo
Concentro en exhalar a ritmo
Me entierran cuchillos 
Al quinto kilómetro
Se difuminan ideas 
Al sexto 
Quiero mejorar el presente
El tiempo rebota en mis pasos 
Los perros me muerden las pantorrillas me clavan los dientes
Espinas muy finas 
Que me se entierran como dolor 
Termino rutina 
7 kilómetros 
Siente te una fuente 
Derrama por tus poros 
Lo sucio 
/Lo que no sirve ni de recuerdo
Lo que mejor no debió 
             Ni emocionarnos/
Tiende tu ropa 
Que seque al sol

23 de abril 





 

miércoles, 15 de abril de 2020

Covid-19-2

Te escribo en el momento que el mundo se derrumba
en este instante a mis pies se desmoronan las empresas
el sistema colapsa mientras los niños se divierten
no cabe duda que este silencio es el acabos
La mortandad no solo ha llegado con la enfermedad
el hambre
la miseria
la peste vinieron juntas
Las cadenas de producción rotas
como nunca en la historia se presentó
La pandemia nos aplastó
la civilización debe cambiar

El turismo se aniquiló
Todo estalla en la cuarentena
nadie sabe la dimensión que esto cambió
debemos intuir que al salir de la cueva
toda la realidad se trastornará
Nuestros instintos más primitivos florecerán
nunca nada volverá a la normalidad
nunca nada más será igual

Ven y dad

Quiero decirme:
Algún día despertaré los ojos de los demás
les mostraré el Della Mirandola de mis neuronas
esos tantos artículos académicos que mastiqué
Letra a letra digerí
sus teorías me tragué
para entregar el mejor proyecto
me pagaron por enterarme
en las incoterms no vacilé
Creí que había salido del sendero de las letras
me fui por el camino pavimentado
Deje los caminos de la naturaleza de la poesía
la necesidad me poseía
pos unos mugres pesos vendí mis ideas
que están enterradas en textos que conservo
en lo profundo de la red
para que un día renazca
el [que parecía] muerto que habita dentro

La enfermedad que la poesía cura
se transformó en bacteria del lenguaje formal
en la piedra que me fumaba de la filosofal
Las tardes de imaginación
tornaron las letras en método
entra todo lo imaginario también.

Me lo mostraré
como quien se escupe
lo sacaré.